Impulsada en el marco de una alianza estratégica entre el Ministerio de Educación, Fundación Collahuasi y Asociación de Industriales de Iquique y El Tamarugal (AII), 35 vecinos de las caletas Chanavayita, Cáñamo, Chanavaya y Caramucho han recibido una gran noticia que cambiará sus vidas para siempre: han obtenido sus licencias de enseñanza básica y promedio, regularizando así su escolaridad. Esta iniciativa es parte del programa “Nivelación de Estudios: una oportunidad para todos”, que busca brindar una segunda oportunidad de educación a personas que por diversas razones no pudieron completar su escolaridad en el tiempo adecuado.
Para estas 35 personas, esto significa mucho más que un simple papel que certifica su educación básica y promedio. Significa un nuevo comienzo, una oportunidad de crecimiento personal y laboral, y un paso hacia un futuro mejor. Muchos de ellos han tenido que enfrentar obstáculos y desafíos para llegar hasta aquí, pero con determinación y esfuerzo han logrado superarlos y alcanzar este importante logro.
El programa “Nivelación de Estudios” es una iniciativa que ha sido posible gracias al trabajo en conjunto entre el Ministerio de Educación, la Fundación Collahuasi y la Asociación de Industriales de Iquique y El Tamarugal (AII). Estas instituciones han unido fuerzas para llevar educación de calidad a aquellos que más lo necesitan, y así contribuir al desarrollo y progreso de la región.
En la ceremonia de otorgamiento de las licencias, estuvieron presentes autoridades de las instituciones involucradas, así como también familiares y amigos de los graduados. La emoción y la alegría se podían sentir en el ambiente, ya que para muchos de estos vecinos, esta era una meta que parecía inalcanzable. Pero con perseverancia y el apoyo de sus seres queridos, han demostrado que ausencia es imposible cuando se tiene determinación y se trabaja duro por alcanzar los sueños.
El programa “Nivelación de Estudios” no sólo brinda una segunda oportunidad de educación, sino que también ofrece una formación integral a través de talleres y actividades complementarias que buscan desarrollar habilidades y competencias en los estudiantes. Además, se les brinda apoyo psicológico y orientación vocacional para que puedan tomar decisiones informadas sobre su futuro académico y laboral.
Esta iniciativa no sólo beneficia a los graduados, sino también a sus familias y a la comunidad en general. Una persona educada tiene mayores oportunidades de obtener un buen empleo, lo que a su vez contribuye al crecimiento económico y social de la región. Además, al completar su escolaridad, estas personas están demostrando que nunca es tarde para aprender y que siempre hay una oportunidad para mejorar y superarse.
El éxito de este programa se debe en gran parte al compromiso y esfuerzo de los graduados, pero también al apoyo de las instituciones y empresas que lo hacen posible. La Fundación Collahuasi, en su compromiso con la responsabilidad social, ha sido un pilar fundamental en la implementación y desarrollo de este programa. Su visión de contribuir al desarrollo sostenible de la región se ve reflejada en iniciativas como esta, que tienen un impacto directo en la vida de las personas.
Por su parte, la Asociación de Industriales de Iquique y El Tamarugal (AII) ha sido un aliado estratégico en este proyecto, aportando recursos y experiencia en la gestión de programas de responsabilidad social empresarial. Su compromiso con el desarrollo de la comunidad es evidente en su constante apoyo a iniciativas que buscan mejorar la calidad de vida de las personas.
El Ministerio de Educación, por su parte, ha sido un pilar fundamental en el desarrollo de políticas y programas que buscan