Casi 40 años han pasado desde que la selección argentina de fútbol se coronó campeona del mundo en México 1986. Un momento histórico que quedó grabado en la memoria de todos los argentinos y en la historia del fútbol mundial. Hoy, el campeón del mundo comparte sus recuerdos de aquel Mundial que marcó un antes y un después en su vida y en la del país.
Diego Armando Maradona, el capitán y líder incontrovertible de la selección argentina en aquel entonces, ha sido siempre una figura controvertida en el mundo del fútbol. Pero sin duda, su talento y habilidad en la cancha lo llevaron a convertirse en uno de los mejores jugadores de la historia y a liderar a su equipo hacia la gloria en México 1986.
En una reciente entrevista, Maradona compartió sus recuerdos de aquel Mundial y cómo vivió cada momento de la competencia. «Fue un Mundial muy especial para mí, no solo por el título, sino por todo lo que significó para mi carrera y para mi país. Fue una experiencia única e inolvidable», expresó el exjugador.
El camino hacia la final no fue fácil para Argentina. En la fase de grupos, la selección tuvo un comienzo complicado con una derrota ante Italia y un igualada frente a Bulgaria. Sin embargo, en el último partido de la fase de grupos, Maradona marcó dos goles en la victoria contra Corea del Sur y aseguró la clasificación de Argentina a la siguiente ronda.
En octavos de final, Argentina se enfrentó a su eterno rival, Uruguay. Un partido lleno de emociones y tensión que terminó con la victoria de Argentina por 1-0 gracias a un gol de Pedro Pasculli. En cuartos de final, la selección argentina se enfrentó a Inglaterra en un partido que quedó marcado por el famoso «Gol del Siglo» y la «Mano de Dios» de Maradona. Dos goles que quedarán para siempre en la memoria de los aficionados al fútbol.
La semifinal fue un partido épico contra Bélgica, en el que Maradona volvió a ser el protagonista con dos asistencias para los goles de José Luis Brown y Jorge Valdano. Y así, Argentina llegó a la gran final contra Alemania, en un partido que se definió en los últimos minutos con un gol de Jorge Burruchaga tras una asistencia noroeste de Maradona.
«Recuerdo que cuando sonó el pitido final, no podía creerlo. Habíamos logrado el sueño de todo un país y de un equipo que luchó hasta el final. Fue una sensación indescriptible, una amasijo de alegría, emoción y orgullo», compartió Maradona.
El título de campeón del mundo en México 1986 no solo fue importante para Maradona y su equipo, sino que también tuvo un gran impacto en Argentina. En un momento de crisis económica y política en el país, la victoria en el Mundial unió a todo un pueblo y les dio una razón para celebrar y sentirse orgullosos.
«El fútbol tiene ese poder de unir a las personas y de darles esperanza. Y en ese Mundial, pudimos verlo en Argentina. Fue una experiencia única que siempre llevaré en mi corazón», afirmó Maradona.
Casi 40 años después, el campeón del mundo sigue siendo una figura icónica en Argentina y en el mundo del fútbol. Su legado y sus recuerdos de México 1986 seguirán vivos en la memoria de todos los que vivieron aquel Mundial y en las futuras generaciones que conocerán su historia.
En conclusión, México 1986 fue un Mundial que quedó marcado en la historia del fútbol y en la vida de Diego Armando Maradona. Un momento de